Un millon y medio de dolares en multas por viajes a Cuba durante el 2004
Ofensiva contra viajes ilegales a Cuba
WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald
En un sorpresivo golpe contra las irregularidades en los viajes a Cuba, el
gobierno de Estados Unidos ha puesto en marcha una estricta revisión de las
licencias otorgadas a agencias y compañías proveedoras de pasajes con destino a
la isla.
El Departamento del Tesoro anunció ayer que la Oficina de Control de Bienes
Extranjeros (OFAC) inició esta semana un programa de auditorías in situ a las
agencias de viajes a Cuba para asegurar que se cumplan los requisitos
establecidos en sus licencias.
''Las auditorías se realizarán para asegurar que los proveedores de viajes
estén cumpliendo con lo autorizado al pie de la letra, educarlos en su papel
de mantener las restricciones vigentes y fortalecer las disposiciones de OFAC
para el cumplimiento del programa de sanciones contra Cuba'', explicó ayer
Molly Millerwise, portavoz del Departamento del Tesoro.
La funcionaria dijo que el proceso continuará de manera permanente y que
OFAC planea auditar alrededor de unas 25 agencias anualmente. En la actualidad
existen más de 250 agencias en Estados Unidos con autorización gubernamental
para operar servicios hacia Cuba.
Es la primera vez que OFAC procede con este tipo de control sobre los viajes
y otras transacciones relacionadas con la isla. El 20 de enero expiró el
plazo para que las agencias informaran de sus operaciones durante el pasado año.
''La detección de serias violaciones puede derivar en suspensión de la
licencia, órdenes de advertencia o imposición de multas'', indicó Millerwise a
través de una declaración escrita.
La ofensiva de OFAC decretó ya la suspensión de una licencia en Miami: la
Estrella de Cuba, una de las agencias con mayor volumen de operaciones a través
de sus ocho oficinas en el sur de la Florida y Puerto Rico.
Millerwise no confirmó el nombre de la agencia suspendida y se limitó a
decir que serían canceladas las operaciones relacionadas con informes falsos,
incumplimientos de las regulaciones de OFAC o acciones que indiquen
incompetencia para conducir un negocio como proveedor de viajes.
Pero Fabio Galoppi, dueño de La Estrella de Cuba, confirmó ayer que agentes
del Departamento del Tesoro irrumpieron el lunes en sus oficinas en Miami con
una carta que les prohibía continuar las operaciones de viajes, paquetes y
remesas a Cuba.
''Obviamente no estamos de acuerdo con esto'', dijo ayer Galoppi. ``La
suspensión está basada en un tecnicismo''.
No obstante, algunos empleados carecían aún de los pormenores de la
información. Una empleada de la oficina ubicada en el 6651 de la Calle Ocho dijo ayer
a El Nuevo Herald que ''seguían abiertos'' y que Galoppi ``se encontraba de
viaje''.
La decisión del Departamento del Tesoro ocurre en medio de una polémica por
el crecimiento de los viajes con licencias religiosas para viajar a Cuba
--tanto de grupos de santeros como de instituciones cristianas-- tras las
restricciones de las visitas familiares impuestas por la administración de George W.
Bush en junio del 2004.
Se calcula que durante el año y medio que llevan en vigor las restricciones
de la Casa Blanca, más de 50,000 personas han viajado a la isla por ``motivos
religiosos''.
Decenas de cartas en protesta por los ''viajes de los santeros'' han sido
enviadas a OFAC por miembros de la comunidad exiliada, que respalda la política
de ''mano dura'' de Bush hacia el régimen de Fidel Castro.
Incluso, el pasado año los congresistas cubanoamericanos pidieron al
Departamento del Tesoro una investigación sobre los viajes religiosos a Cuba, y
lograron reunirse con funcionarios de OFAC para plantearles sus inquietudes sobre
el asunto.
''Lo que hemos pedido es que se haga cumplir la ley y se elimine el
subterfugio de los supuestos viajes religiosos cuyo real propósito es el turismo'',
aseveró anoche el representante Lincoln Díaz-Balart.
La legisladora Ileana Ros-Lehtinen valoró la acción de OFAC como ''una
prueba del compromiso del presidente Bush con el exilio cubano'' y dijo que nadie
debe sorprenderse porque OFAC esté haciendo cumplir las regulaciones
vigentes.
''No hay que inventar nada en este asunto, porque la ley es bien clara'',
declaró Ros-Lehtinen. ``Si la gente recibe cartas en los próximos días
informándoles de sanciones y multas, no deben sorprenderse''.
A comienzos de este año OFAC advirtió a miembros de Pastores por la Paz y
Brigada Venceremos que sus frecuentes viajes a Cuba violaban las leyes
estadounidenses, y pidió explicaciones a unos 200 viajeros de ambos grupos de
solidaridad, reclamándoles información sobre sus últimos viajes. Las cartas son el
primer paso en un proceso que podría conducir a multas de unos $7,500 por
persona.
Solamente en el 2004 la administración cobró $1.5 millones en multas a 894
individuos que viajaron sin permiso a Cuba.
José Montoya, presidente de la Asociación Lucumí Shangó Eyeífe, pronosticó
que ''una retahíla de agencias van a caer por violaciones'' de las normas
establecidas por OFAC.
''Aquí ciertos inescrupulosos están usando las religiones cristianas para
viajar a Cuba, incluyendo gente que antes viajó como santero'', afirmó Montoya,
quien declinó renovar su licencia para viajes a Cuba en junio del pasado
año. ``La llama está creciendo y esto tenía que estallar''.
El Consejo de Latinos Unidos (CLU), una entidad que ha instado al gobierno a
investigar los viajes de santeros a Cuba, saludó anoche la iniciativa de
OFAC.
''Es excelente'', expresó K.B. Forbes, director ejecutivo de CLU.
``Continuaremos brindando información sustancial al Tesoro para impedir que se viole la
ley para llevarle dinero en efectivo a una dictadura brutal''.